Tim Sweeney, responsable de Epic Games, se ha sincerado admitiendo que está más entusiasmado que nunca con la llegada de las nuevas consolas, adelantando que su tecnología estará a la par de lo que son capaces de ofrecer los PCs actuales de gama alta. Comenta que todo el trabajo que están realizando con sus PCs más potentes ya lo pueden llevar a cabo en las nuevas consolas, algo que va a permitir, no sólo mejorar la eficiencia del grupo, sino también sorprender al consumidor, al existir menos limitaciones técnicas.
Pero incluso Sweeney ha ido más lejos. Ante la eterna duda sobre la brecha técnica que veremos entre las actuales y las próximas Xbox 720 y PlayStation 4, el ejecutivo no se calla y adelanta que "habrá un gran salto técnico ", algo que a buen seguro tranquilizará a los escépticos que no confiaban que durante la próxima generación existiera un gran salto técnico.
A estas declaraciones habría que unir las recientes de Crytek, que decían que los primeros juegos de la próxima generación estarian a un nivel muy similar a Crysis 3, algo que había lanzado multitud de dudas sobre la potencia de las nuevas consolas de sobremesa.
Sin embargo, más potencia significa mayores costes de desarrollo. Epic no esconde que los costes de desarrollo se incrementarán considerablemente con las próximas consolas, siendo el doble respecto a como comenzaron hace unos años con Xbox 360 y PlayStation 3. Veremos si esto se acaba reflejando o no en los precios de los juegos.
