Como acceder al mundo secreto de ChupilandiaComo en el mítico
Diablo II, la tercera entrega del sobresaliente juego de
acción y rol de Blizzard esconde un divertido
mundo secreto al que no resulta fácil llegar, aunque bien merece la pena el esfuerzo. Porque
Chupilandia
es, ante todo, una divertida broma en la que se pueden conseguir ítems
de gran valor, amén de aumentar la experiencia de combate de manera
significativa.
A sabiendas de que este es un logro sólo al
alcance de los más perseverantes,os mostramos una guía o una serie de
pasos y consejos a seguir para que, al menos, sea algo más fácil
encontrar los
seis objetos especiales necesarios para forjar
la Cayada que abre las puertas a este mundo secreto.
De primeras os recomendamos
buscar todos estos objetos en
dificultad Normal
tras completar la aventura, porque no hemos notado que en las
dificultades más altas haya mayores probabilidades de encontrar dichos
objetos. Eso, claro, sin contar con que los enemigos os causarán menos
problemas.
Dicho esto, el primer objeto a nuestro alcance se trata de la
Seta Negra, que se puede encontrar en alguna de las habitaciones en el
primer nivel de la Catedral
de Tristán (Acto 1). Hay que tener en cuenta que hablamos de un ítem
aleatorio, lo que significa que no siempre estará en esa zona (puede
aparecer en otras, pero lo habitual es que se encuentre en este lugar);
aunque repitiendo un par de veces la partida, debería aparecer sin
mayor problema.
Nuestro siguiente
destino será la
Mansión de Leoric, donde encontraremos la
Tibia de Leoric en una
chimenea, dentro de la sala que hay justo a los pies de las
escaleras (Acto1). También resulta muy fácil encontrar al
Cencerro de Wirt, ya que nos bastará con tener 100.000
monedas de oro en el bolsillo, que es lo que pide la pequeña comerciante en la ciudad de Caldeum (Acto 2).
Pero la cosa se complica a partir de ahora, ya que entran en juego demasiados componentes de aleatoriedad. Por
ejemplo, para conseguir el
Arcoíris Líquido, debemos transportarnos al
Oasis de Dhalgur (en el Acto 2), y más concretamente a
Senderos al Oasis.
El lugar que nos interesa se trata de un pequeño desfiladero anegado
por el agua que siempre se encuentra en la zona sureste del escenario
(en la parte inferior derecha del
mapa), pero lo difícil llega ahora.
Primero debe aparecer un
mercader
al que atacan unos fantasmas, lo que no siempre ocurre. Pero después,
dentro de la cueva a la que nos da acceso, también debe aparecer un
cofre misterioso.
Por tanto, hablamos de dos componentes de aleatoriedad que dificultan
considerablemente la localización de este objeto. ¿Lo bueno? Que esta
zona está muy cerca del teletransporte, lo que facilita el reiniciar la
búsqueda.
Nuestra siguiente parada nos lleva al
Acto 3, y más concretamente a los
Campos de Masacre (la zona de guerra a la que accedemos a través del teletransporte Puente de Korsikk). La
Gema Cotorra
se encuentra dentro de la cueva aleatoria que siempre aparece en este
lugar. Sin embargo, lo que a nosotros nos interesa es encontrarnos con
un enemigo “morado”, ya que este preciado ítem formará parte del botín
por derrotarle.
Por último, en el
Acto 4, debemos acabar con el
demonio Izual y confiar en que este deje caer los
planos para forjar la Cayada.
En este caso, os recomendamos equiparos con objetos que potencien el
hallazgo mágico para aumentar las probabilidades de que el enemigo deje
caer este objeto tan preciado. Este enemigo, por cierto, se encuentra
al final del acto, así que debéis iniciar la última búsqueda para
llegar hasta él.
Con todos estos objetos, queda
visitar al herrero, entregarle los planos de la Cayada, y pagar 50.000 monedas de oro para que la forje. Con el objeto en las manos, debemos dirigirnos al
Camino a la Vieja Tristán en el Acto 1. Ahí, encontraremos las puertas a Chupilandia.